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"Las parejas que esquían juntos en la mañana, con demasiada frecuencia, ya no son parejas en la tarde," me dijo Lynsey Wright, una chica que trabaja en Vail. "Uno de los dos probablemente va a esquiar mejor que el otro. Con demasiada frecuencia, el hombre pierde paciencia con una mujer que es lenta para aprender. O, si la mujer demuestra que ella si es más  hábil, su hombre muy probablemente  se sentirá molesto".
Todo esto suena como la charla entre chicas. Tuve la tentación de  discutir,  pero que eran tres contra uno. El asesoramiento es para parejas que van a un resort de esquí por primera vez. Al parecer muchas de estas parejas nunca regresan.

¿Más consejos?

Lynsey destacó la importancia de buscar primero un buen  agente  de viajes. "Casi siempre, las agencias de viaje son capaces de  ahorrar  dinero para sus clientes", dijo. "Por ejemplo,  descuentos del 40 por ciento están disponibles en Beaver Creek, pero sólo si  el  paquete  es  reservado  por un agente de viajes”.
Los paquetes para esquiar deben incluir pasaje de avión, transporte terrestre hasta la zona de esquí, alojamiento, alquiler de equipo y boletos de telesilla, si eso es lo que necesitas. “Deben” es aquí la palabra clave. Examina con cuidado la letra chiquita. Decide  de antemano exacta­mente qué es lo que quieres. Podrías, por ejemplo, pensar en rentar un auto y conformarte con esquiar sólo en las mañanas, prefiriendo manejar por los alrededores y hacer recorridos de las tiendas ya avanzado el día. Si es así, con un paquete que incluya transporte terrestre y boletos de telesilla para el día entero, significará que estarás pagando servicios que no vas a necesitar. No te dejes seducir por comodidades como Jacuzzis o chimeneas si no vas a usarlos.
Ahora es el momento de empezar tu preparación física.
Lo ideal es hacer ejercicio en un gimnasio, aunque no todos cuentan con tiempo para hacerlo. Como opción, Liz recomienda usar las escaleras y evitar los elevadores en edificios de oficinas o subir y bajar a pie en casa varias veces al día. Los abdominales y otros ejercicios pueden practicarse durante los cortes comerciales de la televisión.
Por lo general los mejores días para ir a esquiar son los de mediados de semana. Es hacia el fin de semana cuando la gente de lugares cercanos aglomera las pistas. Uno de los placeres de vivir en Denver es estar a poca distancia en coche del mejor esquí del mundo. De todos modos, aun los esquiadores locales están obligados a aparecer por la oficina de vez en cuando. Mientras ellos trabajan, tú puedes divertirte.
La importancia de la instrucción no puede exagerarse. Sin embargo,  la mitad de una pareja nunca debe intentar enseñar la otra mitad. Gritos,  maldiciones, lágrimas y despedidas con demasiada frecuencia serán los resultados.          Una joven chilanga que escuchó nuestra charla dijo que le gustaría ir a Vail, pero no para esquiar. ¿Entonces a qué? "Las spas, las tiendas y a  esperar de noche", dijo. "En Vail, las noches son la mejor parte del día".


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