• Crecimiento y actualidad del turismo.
• Cifras de OMT y el reto de la sustentabilidad.
El documento “Panorama OMT del Turismo” Edición 2017, con cifras comparativas del 2016, es muy interesante por mostrar la tendencia de la actividad en las últimas décadas, en las que el turismo se ha distinguido por un crecimiento prácticamente ininterrumpido a lo largo del tiempo, a pesar de crisis ocasionales, demostrando siempre su fortaleza y su resistencia. Según este trabajo, las llegadas de turistas internacionales en el mundo han pasado de 25 millones en 1950 a 278 millones en 1980, 674 millones en 2000, y 1 235 millones en 2016.
De igual modo, los ingresos por turismo internacional obtenidos por los destinos de todo el mundo han crecido de 2 000 millones de dólares de los EE.UU. en 1950 a 104 000 millones de dólares en 1980, 495 000 millones en 2000, y 1 billón 220 000 millones en 2016. Además de los ingresos obtenidos en los destinos, el turismo internacional generó también 216 000 millones de dólares de los EE.UU. en exportaciones por servicios de transporte internacional de pasajeros prestados a no residentes en 2016, lo que eleva el valor total de las exportaciones turísticas a 1.4 billones de dólares de los EE.UU. (4 000 millones de dólares al día de media). El turismo internacional representa el 7% de las exportaciones mundiales de bienes y servicios, tras subir un punto porcentual desde el 6% en 2015. El turismo ha crecido con mayor rapidez que el comercio mundial durante los últimos cinco años. Como categoría mundial de exportación, el turismo ocupa el tercer puesto, tan solo por detrás de productos químicos y de combustibles, y por delante de automoción y de alimentación. En muchos países en desarrollo, el turismo es la principal categoría de exportaciones.
El documento aludido establece que en 2016, Francia, los Estados Unidos de América, España y China siguieron ocupando los primeros puestos por llegadas internacionales. En cuanto a ingresos por turismo internacional, los Estados Unidos y España permanecen en cabeza, seguidos de Tailandia, que escaló hasta la tercera posición desde la sexta, y de China, que ocupa el cuarto puesto. Francia e Italia avanzaron hasta el quinto y sexto puesto respectivamente en la clasificación de ingresos, mientras que el Reino Unido, México y Tailandia pasaron a los puestos sexto, octavo y noveno en llegadas. China, los Estados Unidos y Alemania lideraron el turismo emisor en sus respectivas regiones en 2016, y se mantuvieron a la cabeza del ranking de gasto en ese orden.
Estos datos sirven para establecer claramente que el crecimiento del turismo es una constante desde hace setenta años, lo cual es desde luego positivo pero que también implica el gran reto de la sustentabilidad: Al tener cada vez más visitantes muchos lugares atractivos y comunidades pueden llegar a experimentar los efectos de la saturación, de ahí la importancia que nuevas opciones se vayan creando para absorber una demanda siempre en aumento. La creación de nuevos productos turísticos y la adecuada gestión de la actividad es una circunstancia determinante de la buena marcha del fenómeno turístico para evitar se convierta en un agente depredador del entorno natural y del tejido social. Estar apercibido de que no sólo se trata de hacer crecer el turismo sino de que debe diseñársele y gestionarse adecuadamente para que sus efectos y manifestaciones sean siempre positivos es el reto de autoridades, empresarios y planificadores.
