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Hablemos de Sectur CDMX

No cabe duda que durante su gestión como Secretario de Turismo de la Ciudad de México, Miguel Torruco Marqués realizó una labor muy superior a la de cualquiera de sus antecesores.
Con Miguel Torruco el rumbo turístico de la Ciudad de México, que casi estaba a la deriva y funcionaba en automático, fue retomado y se establecieron muchas acciones concretas que han dado y seguirán dando resultados.


Desgraciadamente en el mundo político de México, las apariencias importan más que los resultados y las alianzas políticas importan más que los logros, y por eso Miguel tuvo que dejar la Secretaría de Turismo.
No era ningún secreto que Torruco Marqués llegó a la Secretaría de Turismo del entonces Distrito Federal debido a su labor durante la campaña de López Obrador, donde era el elegido para ser Secretario de Turismo Federal en caso de que AMLO hubiera ganado las elecciones.
En esos tiempos Mancera todavía se llevaba bien con López Obrador y no tuvo ningún problema para, después de ver el plan que Torruco tenía para el turismo de la Ciudad de México, aceptarlo como parte de su gabinete.
A través de los años que estuvo al frente de Sectur CDMX, Miguel Torruco fue uno de los secretarios con más altas puntuaciones dentro del gabinete de Mancera.
Su labor como Secretario de Turismo se distinguió por tomar acciones diseñadas a aumentar el turismo nacional hacia la Ciudad de México, pero también el turismo internacional lo que colocó a la CDMX nuevamente como un destino de clase mundial.
Hasta el último puente que le tocó como Secretario de Turismo, el del cinco de febrero, las cifras de visitantes a la Ciudad de México seguían en aumento.
Hubo varias cosas que Miguel quiso lograr y no pudo, pero un análisis a fondo mostraría que varias de las cosas que dijo que iba a hacer y no hizo (como los centros de información turística de alto nivel como hay en países europeos) fueron en parte por el bloqueo absurdo y retrógrada que Sectur CDMX sufrió de parte del Fondo Mixto de Promoción Turística de la Ciudad de México.
Paradójicamente, aquél que bloqueaba al Secretario de Turismo ocupa ahora el cargo que dejó Torruco. Creemos que es un gran error del gobierno de Mancera poner en el cargo de secretario a alguien cuya actuación al frente del fondo mixto de promoción debería ser analizada a fondo, y si nos vamos más lejos, auditada con lupa.
El fondo mixto de promoción ha usado cantidades de dinero realmente fuertes para comprar los aplausos de diferentes asociaciones y organizaciones turísticas y eso es, si no necesariamente ilegal, sí poco ético. Al final de cuentas no importa tanto lo que pase en el resto del gobierno de Mancera, quien aparentemente es un personaje cuyos días como político están contados. Veremos qué pasa después.


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