Columnistas

• Los fines de semana largos.
• Impulsores de la actividad turística.
• Perfeccionarlos es fácil y aumentaría sustancialmente los beneficios.
• Apoyemos la iniciativa de que el asueto sea el viernes y no el lunes.
En otras ocasiones hemos ponderado en este espacio las virtudes que poseen para el turismo los fines de semana largos, que se implementaron hace unos años en nuestro país: Una modificación a la Ley Federal del Trabajo permitió que los días oficiales de descanso, que por calendario caían entre semana, se trasladaran al lunes anterior, con lo que se consiguió  para muchísimos trabajadores y empleados que ya tenían semana inglesa,  contar con tres días para programar actividades de ocio, entre ellas el turismo.
La medida fue impulsada por el entonces secretario del trabajo Carlos Abascal, pero como su colega de la Secretaría de Turismo, Rodolfo Elizondo, no tenía mucha idea de la actividad, no pudo identificar las ventajas de que el día de asueto marcado fuera el viernes y no el lunes.
De todos modos, la medida ha sido, desde luego, muy positiva para la actividad turística, pues permite el que millones de personas se trasladen fuera de su lugar de residencia habitual, generando derrama económica en los establecimientos y centros turísticos que antes no se podía verificar, pues el empleado o trabajador pocas veces sabía con anticipación si sus patrones “iban a dar o no el puente”, por lo que no podían hacer reservaciones o negociar buenas tarifas y por lo tanto se constreñía la posibilidad de realizar el periplo.
La enorme mayoría de los empresarios y empleados turísticos ha visto el buen efecto que ha tenido la instauración de los fines de semana largos, pero una medida tan benéfica puede ser aún mejor si se hace el pequeño cambio que desde hace años hemos propuesto es este espacio: Cambiar el día de asueto a viernes en lugar de lunes.
Este cambio, en apariencia insignificante, representará una mejora cuantitativa y cualitativa muy importante, en razón de que los lunes, el grueso de los restaurantes, bares, discos, parques temáticos, zonas arqueológicas, museos y centros de diversión varios cierran sus puertas, pues ya lo tienen calculado como un día “flojo” y por lo tanto ideal para el descanso de sus propios empleados y para labores de mantenimiento o compras.
Así las cosas, si el fin de semana largo sigue siendo el lunes, muchos atractivos turísticos, empresarios  y empleados no podrán atender a los visitantes. El pasado lunes 18 de marzo, por ejemplo, se pudo constatar como multitudes querían ir a un restaurante de especialidad, a un museo, a una zona arqueológica o a un bar, pero no pudieron pues tales sitios estaban cerrados.
Si el viernes es el día de asueto con el que inicia el fin de semana largo, los beneficios económicos para los empresarios y trabajadores turísticos y del ocio serán potenciados, pues muchos periplos empezarían desde el día jueves en la tarde o en la noche, con el consiguiente aumento del consumo desde el propio jueves, día en que todo el equipamiento turístico y del ocio está funcionando y puede absorber la demanda extra generada por el fin de semana largo. Lo mismo ocurriría con el día viernes, el sábado y el domingo, días en que los museos, atractivos y restaurantes pueden operar a toda capacidad.
El resultado para las familias sería una mayor satisfacción y mejor aprovechamiento de su tiempo, ya que se eliminaría la frustración de no poder disfrutar del restaurante o atractivo turístico precisamente cuando se tiene tiempo para hacerlo.
En razón de estas consideraciones, un grupo de diputados amigos, asesorados por su servidor, presentará en breve una iniciativa de modificación a los ordenamientos respectivos, con el fin de que se logre este sencillo pero importante ajuste en los fines de semana largos. Invitamos a todo el medio turístico, en especial a los flamantes secretarios de turismo federal Claudia Ruiz Massieu Salinas, y del Distrito Federal, Manuel Torruco Marquéz, a los demás funcionarios turísticos y legisladores de las Comisiones de Turismo y Trabajo de las cámaras de diputados y senadores, a las cámaras y asociaciones turísticas, a los sindicatos y uniones de trabajadores  y en general a todos los ciudadanos que disfrutan de los fines de semana largos, a unírsenos en este esfuerzo por mejorar palpablemente la actividad turística. Si se desea unirse a este esfuerzo contactar a Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.   
Todos saldremos ganando.