Advertisement

Latragedia de Acapulco y de las costas en general.
¿Y la secretaria de turismo?


El fenómeno turístico es, por su naturaleza, multifacético, y para su correcto análisis, interdisciplinario: Las causas y efectos que se manifiestan en él van desde las económicas, hasta las políticas, sociales, culturales, medioambientales, tecnológicas o demográficas, por mencionar sólo algunas de las que hemos estudiado los que nos preparamos en la planificación turística.

Si los elementos que conforman el Sistema Turístico no se interrelacionan adecuadamente, los desequilibrios y hasta las catástrofes no tardan en manifestarse. La reciente tragedia que afectó muchos de los estados del país, pero en especial a Guerrero, y en particular a Acapulco, evidencian una vez más lo que no debe

• El crecimiento de la actividad turística detenido por prácticas gerenciales pre-taylorianas.

En la pasada entrega (TURISTAMPA, 5 de agosto de 2013),  se retomaron los resultados de una investigación sobre precios y salarios realizada por el Banco Suizo UBS, que reveló que los mexicanos son de los que más trabajan y están entre los que menos ganan y entre los que menos vacaciones tienen en el mundo. Las implicaciones para la actividad turística son importantísimas y deben llevarnos a reflexionar sobre los escenarios que nos depara esta situación en el mediano y largo plazo, pues de no corregirse las tendencias apuntadas, se desperdiciarán incontables oportunidades de desarrollo para el sector turístico y se cancelará la posibilidad de elevar el nivel de vida de la población en general.
El estudio aludido pone de relieve las consecuencias de que en México se haya implantado desde la época colonial una producción basada en el vasallaje de la población autóctona mediante figuras como la encomienda o de plano la esclavitud. Las élites se acostumbraron a que “era normal” que a los trabajadores se les pagara nada o casi nada por su labor. Al llegar la Independencia la situación no cambió gran cosa, pues la élite peninsular simplemente fue sustituida por la élite criolla que siguió aplicando las mismas prácticas de explotación de la mano de obra indígena y mestiza a lo largo del siglo XIX, llegando a los documentados excesos y abusos del porfiriato, que llevaron a los revolucionarios a por primera vez legislar sobre las condiciones laborales en el Art. 123 de la Constitución de 1917, uno de los ordenamientos sociales más avanzados del mundo, pero que por desgracia ha sido en la práctica desactivado con incontables argucias legaloides y últimamente de plano nulificado con la “reforma” llevada a cabo al final del gobierno de Calderón en acuerdo con el entonces presidente electo Enrique Peña Nieto. Así, mientras otras sociedades han avanzado en materia de mejora de las condiciones laborales, la élite mexicana sigue anclada en prácticas de explotación cuasi coloniales y pre-taylorianas, es decir, anteriores a los postulados de la administración más elemental propuestos por Frederick Taylor hace ya un siglo.  

• Los mexicanos son los que más trabajan y los que menos vacaciones tienen.
Esto lo revela el último estudio sobre precios y salarios del banco suizo UBS, realizado en 72 países, y destacado por el periódico “El Financiero”:
Mientras que los mexicanos trabajan al año 2 mil 375 horas, los franceses laboran mil 558 horas, lo que significa que los trabajadores del país galo laboran 817 horas menos.
Lo paradójico es que, pese a que los mexicanos chambeamos más, eso no se refleja en los días de vacaciones, pues mientras en México los trabajadores “gozan” de 6 de días de descanso en su primer año laboral, los franceses tienen cinco veces más vacaciones por el mismo tiempo laborado.


• La Organización Social “Di NO a Los Casinos” lleva propuesta a San Lázaro.


En el marco de las actividades de la Comisión Especial para Indagar el Funcionamiento de las Instancias del Gobierno Federal Relacionadas con el Otorgamiento de Permisos para Juegos y Sorteos, se recibió en reunión a nuestra organización, en donde se señaló que por cada dólar que se embolsa un casinero, la sociedad debe gastar al menos seis dólares para subsanar los efectos que el juego genera como lavado de dinero, ludopatía, criminalidad, problemas familiares, endeudamiento, problemas psicológicos, más drogadicción y más alcoholismo, entre otros.


Se enfatizó ante los diputados, que la Secretaría de Gobernación debe terminar con esta problemática situación, si realmente le interesa el bienestar de la sociedad. Se mencionó que la Ley Federal de Juegos y Sorteos, en su Artículo 1°, establece la prohibición de los juegos de azar y de apuestas en el territorio nacional.

• El negociazo de la venta de terrenos costaneros a extranjeros.
• La especulación y corrupción en su forma más descarada.
• Los que debieran legislar por México legislan contra él para favorecer a sus amigos.

Verdadera vergüenza ajena da escuchar a los diputados de lesa patria que han propuesto modificar el Art. 27 constitucional para permitir a los extranjeros adquirir pleno dominio sobre los terrenos costaneros inmediatos a las playas y a las fronteras. Se nota a leguas que no les importa el país ni la salvaguarda de nuestros recursos, prefiriendo obrar contra México en beneficio de extranjeros.

Si la perniciosa modificación es aprobada por el Senado, no tardará mucho tiempo en que una verdadera e ignominiosa  cerca sea levantada entre la población mexicana del altiplano y la costa: No es exagerado pensar que tendremos que pedir permiso a extranjeros para poder pasar a “nuestras” playas.


Turistampa
Todos los derechos reservados ® 2023 [email protected]