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Categoría: Análisis Turístico

Por Daniel Oivares Villagòmez.

El anuncio de importantes laboratorios internacionales de un avance muy significativo en la obtención de una vacuna para enfrentar la pandemia es una noticia que fue recibida con gran aliento por la comunidad mundial. Las reacciones no se han hecho esperar, y los escenarios para la recuperación, en caso de que verdaderamente se llegue al completo éxito en la inmunización, hablan de que, en una perspectiva muy favorable, a fin de año se cuente ya con la vacuna, mientras que en un escenario un poco más conservador se menciona marzo como fecha en la que estaría disponible masivamente.

En el caso de México, el gobierno había anunciado previamente que ya se tenía un acuerdo de precompra para 51 millones de dosis y otras tres opciones de precompra, con las cuales llegar a cubrir el universo de población total del país.    

Ante lo trascendido, la Bolsa Mexicana de Valores tuvo avances significativos, que no se apreciaban desde hace 8 meses, mientras que la Moneda Nacional ha recuperado terreno y su cotización se sitúa en niveles que no tenía incluso antes del inicio de la pandemia. Todo lo anterior supone el que los mercados ven con gran alivio el avance hacia la obtención de un fármaco eficaz que libere al mundo del confinamiento.

Casi coincidiendo con el anuncio sobre la vacuna, los conteos preliminares resultantes de la elección presidencial en EEUU vislumbran nuevos aires políticos en el vecino del Norte, que son muy bien recibidos por la comunidad planetaria: En el plano interno estadounidense destaca el radical cambio previsible en el manejo de la pandemia, pues el virtual ganador piensa poner a la cabeza de la lucha a un equipo de científicos expertos e inspirarse en el modelo del “New Deal” de Roosevelt para combatirla, lo que implica un gran esfuerzo presupuestal y un compromiso nacional que no se había visto, lo cual supondría una más rápida y solida recuperación.

En el plano externo, se prevé una más juiciosa y responsable política exterior, sin estridencias y ataques verbales sin sentido, pues quien se perfila como ganador es un muy experimentado político que desde 1972 ya ha estado en la palestra en posiciones de primera importancia, lo que supone una gran madurez a la hora de ejercer el mando del país más poderoso del mundo.

Con la justificada reserva que ambas noticias imponen, pues no hay que dejar que el infundado entusiasmo haga bajar la guardia o impulse decisiones apresuradas, es desde luego muy relevante para el turismo el que los escenarios que se insinúan se confirmen, pues esto supone que el año que viene se viera ya la luz al final del túnel y se verificara una autentica recuperación. Todavía hay riesgo de que la vacuna no fuera del todo eficaz y además tiene la pega de que requiere una cadena de frio para temperaturas muy bajas (-70 grados centígrados) lo cual dificulta enormemente su aplicación en la dilatada y tórrida geografía turística nacional e internacional. También pudiera ser que los conflictos poselectorales en EEUU se complicaran de tal manera que se generara inestabilidad económica, la cual desde luego afectaría particularmente a México en razón de la vecindad y de los tratados comerciales. Por estos dos considerandos conviene ser cautos, sin embargo, hay razones objetivas que permiten ver las cosas con mayor esperanza que hace apenas unos días: Que así sea.