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Categoría: Editorial

El "Nuevo Orden" de la Aviación Civil Mexicana

El caso de Mexicana de Aviación es un ejemplo claro del doble discurso que ha caracterizado al gobierno de Calderón en tantas cosas: Por un lado, el gobierno se lava las manos de los problemas de la aerolínea y dice que ésta debe recuperarse exclusivamente con dinero de inversionistas privados, pero por otro lado, con sus acciones que parecen erradas a propósito, se ha erigido a sí mismo como el principal obstáculo y obstaculizador de cualquier acción que pudiera salvar a la aerolínea.
Mexicana de Aviación no está muerta todavía, pero lleva ya más de un año en estado de coma y el gobierno mexicano, en su carácter de tutor indiferente, o de malvada madrastra, ni le desconecta la vida artificial ni le permite recibir el tratamiento necesario para recuperarse. Parece que para lavarse las manos, el gobierno ha decidido que Mexicana termine el sexenio en estado vegetativo.


¿Pero realmente es para lavarse las manos? ¿No será que dentro del gobierno, en algún nivel importante, haya un plan macabro para eliminar la competencia aérea y que en el "nuevo orden" únicamente queden como protagonistas importantes Aeroméxico, Volaris e Interjet?
El hecho de que el gobierno no haga nada para permitir el reinicio de actividades de Aviacsa, la otra víctima del doble discurso gubernamental (un caso mucho menos sonado que el de Mexicana pero también de importantes consecuencias para el "nuevo orden" de la aviación civil mexicana) nos hace pensar que a lo mejor sí hay algo de cierto en los rumores cada vez más crecientes de que el gobierno de Calderón nada más quiere que queden tres aerolíneas de importancia en el "nuevo orden" de la aviación civil mexicana.
El gobierno ha mantenido argumentos quasi infantiles al decir que no debe interferir en el caso de Mexicana para rescatar a una empresa privada. Pero es muy obvio que la "no intervención" es una forma de intervención, ya que de manera muy directa está decidiendo el futuro de la aerolínea más tradicional de México.
En otras palabras, en el caso de Mexicana, al no hacer "nada" el gobierno, realmente está haciendo mucho... por Mexicana para darle el tiro de gracia, y por las otras tres que quedan, para beneficiarlas indirectamente de manera muy directa.
De fondo, lo que el gobierno mexicano está logrando al deshacerse de Mexicana y Aviacsa es establecer un “nuevo orden” en la aviación civil mexicana en que el concepto “bajo costo” eventualmente desaparecerá, la aviación regional también, y las tarifas se inclinarán a lo alto.