Imprimir
Categoría: Editorial

El Tianguis Debe Ser Itinerante

Hace ya varios años un buen amigo mío, funcionario gubernamental y hombre muy capaz, hablando sobre una situación específica en un destino turístico mexicano me dijo:
“México es un país en que muchas veces, aunque el gobierno federal quiera lograr algo e incluso el gobierno estatal también, si el presidente municipal dice que no... pues es no.” Mi amigo añadió: “A veces los intereses locales son tan fuertes y están tan arraigados que los mejores planes se vienen abajo ante las acciones caprichosas de unos pocos. Eso no debería de ser. Eso detiene el progreso. Pero eso sucede”


Aunque ese funcionario se refería a una situación que ocurrió hace varios años (específicamente estaba hablando de la construcción del aeropuerto de Ixtapa-Zihuatanejo), ese incidente nos vino a la memoria ahora que la inteligente decisión de hacer el Tianguis Turístico itinerante se ha visto detenida por resoluciones judiciales que no entendemos, no compartimos y todavía nos cuesta trabajo creer.
Como ya hemos comentado anteriormente, cuando en el año 2000 tuvimos los directivos de Turistampa una reunión privada con la entonces incipiente nueva secretaria de turismo, Leticia Navarro, una de las recomendaciones que le hicimos fue la de mover el Tianguis Turístico a otras ciudades mexicanas y buscar que cada año el tianguis se llevara a cabo no solamente en destinos diferentes, sino en regiones diferentes del país.
En aquel entonces ella nos dio a entender que el Presidente Fox no tenía la voluntad política de “meterse” con el gobierno estatal de Guerrero o con el gobierno local de Acapulco.
Once años después finalmente se ha tomado la decisión de hacer el tianguis itinerante, ya que este es EL evento turístico de México. No de Guerrero, ni de Acapulco, ni del PRI, el PAN o el PRD sino de MEXICO.
Sin embargo, como sucede normalmente en la inmadura vida política mexicana, parece que al final de cuentas nada más va a quedar una ciudad y un estado contento y los demás van a quedar enojados, indignados, preocupados por su propio microcosmos en vez de interesarse por el beneficio de todo México.
Pero primero, tenemos que esperar a ver cómo se resuelve la situación jurídica que busca mantener, a la fuerza, al tianguis en Acapulco.
La lógica y la razón indican que el tianguis debería de llevarse a cabo en diferentes ciudades... pero todos los que vivimos en este hermoso país sabemos que muchas veces la lógica y la razón no cuentan.