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Categoría: Mexico

Izamal enamora a todo aquel que la visita. La ciudad, famosa por sus construcciones coloreadas de amarillo se muestra orgullosa no sólo de ser un verdadero Pueblo Mágico, sino por ser considerada como la Ciudad de las Tres Culturas.
Aquí convergen en perfecta armonia las antiguas pirámides mayas con los típicos patios españoles y diversas construcciones del orden religioso como iglesias o el convento de  San Antonio Padua que, junto con casas y edificios enmarcan encantadoras plazuelas en las que los locales se refrescan y relajan al caer la tarde.

En esta ciudad señorial el tiempo parece detenido. Todo transcurre con calma y esto se contagia a los visitantes, quienes dejan atrás estrés y las prisas para descubrir -con mucha calma- los atractivos del lugar.
En Izamal lo primero que hay que visitar es la pirámide del Kinich Kakmó, que tiene una base de cuatro hectáreas y 34 metros en su parte más alta. Para rrecorrerla, lo mejor es tomar un paseo en calesa desde la plaza central.
Otro edificio de gran importancia es la pirámide de Itzamatul, la cual fue adosada con una gigantesca plataforma en la que se aprecian las tres etapas de construcción del edificio de 22 metros, mismo que fue dedicado al fundador de la ciudad. Aquí, se han encontrado alrededor de 80 estructuras prehispánicas,  la más famosa es Kinich Kakmoo, que significa “Rostro Solar”.
Después, hay que dirigirse al Convento de San Antonio de Padua, que tiene el atrio el más grande del mundo, después de la basílica de San Pedro, en el Vaticano. Ésta es una verdadera joya de la colonia. Cuenta con un museo de sitio, un adoratorio y por las noches, todos los martes, jueves, viernes y sábados, presenta un espectáculo de luz y sonido en punto de las 20:30 horas.
Luego de recorrer este importante recinto hay que bajar hacia el parque central y resguardarse de los rayos del sol bajo la sombra de sus árboles.  Ya ahí se puede puede retomar a pie el paseo por las calles del primer cuadro o mejor aún, en una calesa.
Para cerrar cerrar el día nada mejor que visitar alguno de los restaurantes  de la ciudad y probar  los platillos más representativos de la gastronomía yucateca como el poc chuc, los papadzules, el queso relleno y la cochinita pibil.