Los fraudes en las ventas turísticas
En la primera plana de esta edición de TURISTAMPA presentamos la noticia de que Amadeus lanzó para las agencias de viaje en México la solución de Amadeus Fraud Alert, parte de su portafolio de soluciones Amadeus Travel Payments.
Con Amadeus Fraud Alert las agencias tendrán la posibilidad de obtener un escaneo automático antifraude en todas las transacciones de pago que estén asociadas a una reserva aérea antes de que el pago se autorice y se emita el ticket. Esta funcionalidad ofrece un chequeo en tiempo real - con base a distintos indicadores de riesgo - realizado por ACI Worldwide, una empresa líder en el control del fraude en el mundo.
Seguramente hay otras compañías que ofrecen opciones para evitar los fraudes en las ventas de productos turísticos. Sea cual sea la solución que un agente de viajes escoja, es importante señalar que bien vale la pena que los agentes de viajes consideren la importancia de implementar una solución de este tipo en sus agencias.
¿Por qué? La mayoría de los agentes de viajes que lean este editorial ya saben porqué. Ellos mismos o algún otro agente que conocen seguramente ha sido víctima de un fraude o de un intento de fraude en la venta de boletos de avión y otros productos turísticos.
En la nota de Amadeus presentamos la interesante información de que “según el reporte de Fraude Online 2015, llevado a cabo por el Instituto Latinoamericano de Comercio Electrónico, que en el último año el 75% de las empresas del mundo fueron víctimas de fraude, que el 6.8% de las órdenes de pago en América Latina son rechazadas por sospecha de fraude y que el 1.4% se convierten en contra cargos,”
Sabemos que hasta los agentes de viajes más experimentados han sido víctimas de fraudes en la venta de los diferentes segmentos del producto turístico y de viajes.
Por supuesto el fraude en la venta del producto turístico no es algo nuevo. Prácticamente desde que se inició la venta de boletos de tren, autobús y avión, ha habido gente muy hábil para hacer trampa que se han dedicado a buscar formas de engañar a los agentes de viajes y a las compañías de transporte.
Pero obviamente ese problema se ha visto acrecentado debido al comercio electrónico.
Con el comercio electrónico es posible querer hacer trampa sin ni siquiera arriesgarse a mostrar la cara.
La mayoría de los fraudes en venta del producto turístico son hecho por gente que nunca muestra la cara, que se esconde tras pantallas de computadoras o bajo fachadas de negocios virtuales y falsos.
Esperemos que la tecnología se siga desarrollando cada vez más en un área tan importante como la de prevención y detección de fraudes.
Se ve difícil, pero ojalá y pierdan los tramposos.