• El aeropuerto de Palenque ampliado para operación con “jets” comerciales.
• La terminal es operada por Aeropuertos y Servicios Auxiliares desde 1998.
Con una inversión de mil 269 millones de pesos aportados por los gobiernos federal y del estado de Chiapas, el 14 de febrero pasado fue inaugurado el nuevo aeropuerto de Palenque. Destaca la importancia que tiene esta obra de infraestructura para la conectividad aérea, el impulso al sector turístico, y junto con ello, generar empleos y mayor actividad económica.
La nueva terminal tiene capacidad para recibir a 300 mil pasajeros al año, además de que las dimensiones de su pista -2.5 kilómetros de largo y 45 metros de ancho- le permitirá por fin recibir aeronaves de mediano y largo alcance impulsadas por turborreactores, con lo cual aumenta considerablemente el potencial turístico de la región, ubicada en las llamadas rutas Maya y Selva, además de los diversos centros eco-turísticos con que cuenta la entidad.
El aeropuerto -construido en una extensión de 250 hectáreas- cumple ahora con todas las especificaciones técnicas y de calidad internacionales, incluyendo normas ambientales.
La aerolínea Interjet está dando respaldo al proyecto, pues desde el próximo 13 de marzo, dicha compañía realizará el primer vuelo comercial entre Palenque y la Ciudad de México, con dos frecuencias semanales, utilizando equipo Sukhoi Superjet-100 de fabricación rusa.
Se espera que este proyecto ayude a promover la llegada de vuelos de fletamento o “chárter”, desde otros países, a más de otras frecuencias, desde diversos puntos del país.
Hay que recordar que hasta ahora, la mayoría de los turistas que visitan Palenque deben viajar al aeropuerto internacional de Villahermosa, en el estado de Tabasco, a unos 150 kilómetros de esta localidad. El nuevo aeropuerto para “jets” está ubicado entre la cabecera municipal de Palenque y la población de Pakal-Nah, con lo cual, a partir de ahora, el viajero podrá trasladarse fácilmente a toda la oferta turística de la región.
El hecho de contar con la posibilidad de atender vuelos de “jets” comerciales desde luego que es relevante, aunque hay que recordar que desde 1998 Aeropuertos y Servicios Auxiliares ya operaba en el mismo sitio un aeropuerto regional, por lo que, al margen de la propaganda oficial, en realidad estamos ante una ampliación del aeropuerto preexistente.
Es también muy significativo aclarar que, de nueva cuenta, las inversiones corrieron a cargo del estado, es decir, se financiaron con nuestros impuestos y petróleo. Hecho que nos hace retomar la reflexión que en este espacio se ha ventilado en otras ocasiones: Después de 25 años de las privatizaciones, los grupos aeroportuarios beneficiados por los malos gobiernos de Salinas y sucesores no han sido capaces de construir un solo aeropuerto nuevo, a pesar de las leoninas tarifas que les cobran a las aerolíneas y al público usuario.