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Categoría: Aviación

• Expertos en aviación advierten riesgo
• Deben de tener mucho cuidado: IATA
Por Víctor Manuel Bermúdez


Según expertos en aviación advierten de los riesgos que implicaría concesionar a la Iniciativa Privada el Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) como lo ha manifestado AMLO, quien ha expresado que sería preferible cederlo que utilizar recursos públicos para su construcción.


Por su parte el virtual titular de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, Javier Jiménez Espriú, ha dicho que se analizarán las probabilidades de que sean inversionistas particulares quienes construyan el nuevo puerto aéreo, de lo contrario se explorará también la posibilidad de construir dos pistas en la Base Aérea de Santa Lucia.
Sin embrago expertos del sector aéreo estiman que se debe tener mucho cuidado en el objetivo del estado, que sea el de sacar el máximo beneficio a corto plazo para sanear sus procesos financieros.
Para el director regional de aeropuertos de la Asociación Internacional de Transporte Aereo (IATA, por sus siglas en Inglés) Felipe Pereira, dijo que la visión de gran parte de los países latinoamericanos es equivoca porque se está viendo mucho al corto plazo.
Añadió que concesionar no es la panacea y esa perspectiva no debería de ser el objetivo, el gobierno mexicano debe buscar un modelo de gestión que permita hacer que el aeropuerto garantice ganancias justas a los inversionistas, además de que permitan tener rendimientos operativos que beneficien en términos financieros a la administración gubernamental  a largo plazo.
Es necesario aclarar cuál es el propósito central del nuevo puerto aéreo, ya que seguramente será el hub más importante del área latinoamericana a diferencia del aeropuerto Tocumen de Panamá que es un hub regional, el de México, deberá destacarse por ser un país más grande con necesidades del transporte doméstico, donde operan aeronaves con modelos de negocios muy diversos.
Hay diferentes opciones para solucionar el problema de los costos, pero solo con dialogo constructivo entre especialistas de todas las partes involucradas se podrá contar con un aeropuerto que resuelva los problemas de transporte, aliente el turismo, fortalezca la economía y mejore la competitividad.
El caso de la aeroterminal panameña es un ejemplo de cómo el sector aéreo de un país puede significar hasta el 15 % del PIB, pero también implica que no se cometan costosos errores en su proyecto.
Como sucede, en todos los nuevos proyectos, el puerto aéreo que dará servicio a la capital mexicana, tiene que considerar las tendencias mundiales, como aviones más grandes y nuevas medidas en materia de seguridad, entre otros.
El directivo de la IATA expresó que el NAIM será caro de operar, por lo cual debe de haber una disciplina en términos de manejo y de costos, porque México, de por sí, ya es caro, además el riesgo de pasar por la capital del país, si es caro no va a ver negocio.
Sugirió que el nuevo aeropuerto se opere mediante un modelo, en el cual el  operador, si se obtienen los beneficios esperados reciba una cuota fija por la gestión  y en caso de superar las expectativas de operación pueda ser recompensado con bonos.
Destacó que una de las preocupaciones más grandes que se han visto alrededor del mundo es que concesionar significa subir los costos de manera considerable pero la calidad de los servicios no sube en la misma proporción.
Sugirió que el gobierno debe de enfocarse en la construcción del NAIM, que se pueda inaugurar, en su primera etapa y posteriormente continuar con el desarrollo del proyecto analizando las diferentes opciones de financiamiento.
Resaltó que México no debe equivocarse, el nuevo puerto aéreo está destinado a convertirse en el hub de mayor importancia en la región de la América Latina y deberá tomar en cuenta las experiencias de países como Argentina, Chile, Brasil y Perú donde se han hecho concesiones aeroportuarias con resultados no siempre óptimos.